Papá 2 - El Abandono 0; ya es clásico...22

Otra vez lo mísmo, otra vez paliza, otra vez se van con verguenza y cada vez la distancia es mayor; 22. No quedan nigun tipo de dudas, Peñarol pasó por arriba, en su día, a su hijito bobo que se encargó de hablar y hablar de su progenitor en el correr de la pasada semana. Lo que pasó hoy, fue histórico, papá se floreó, perdonó en varias ocasiones (actitud que demuestra nuestras condiciones de padre), pisó fuerte y dijo "acá estoy yo, y conmigo no se jode". El hijo bobo, cumplió con la historia y quedó pegado adelante de todo el mundo fútbol; el abandono, palabras que no podemos obviar al referirnos a la poca historia de nuestro hijo, se hizo presente en el Parque Batlle en la forma de su capitán, que, imotencia y desesperación mediante ante el ímpetu y supremacía de su padre, arrojó su trapo blanco hacia la gloriosa hinchada del Más Grande del Uruguay.
Pero dejémos a la gallinas con sus riñas tranquilas y hablemos de lo demostrado por Papá Peñarol en el campo de juego. Todos los jugadores se mandaron terrible partido pero hubieron figuras que hicieron la diferencia; ése es el caso de Charlie Good que confirma sus condiciones y el amor que siente por la camiseta, la antítesis de lo ofrecido por el delantero gallina. También se destacó y de gran forma Maxi Bajter, ilusionó con lo demostrado en el segundo tiempo y si mantiene el nivel puede ser el regreso de un futuro gran jugador. Pacheco ratifica su carácter de ídolo Carbonero.
Para ir cerrando, quisiera agradecer a todos los jugadores y el cuerpo técnico por lo que nos ofrecieron hoy. Me voy a aprontar el bolso para la vuelta al pago seguro de lo grande que es Peñarol y entonando el grito más lindo que puede haber los dejo con un saludo para todos los padres del mundo, especialmente los manyas y el mío.

PEÑAROL NOMÁ!!!